El falso converso (Joseph Alleine)

24.06.2013 20:44

El falso converso toma a Cristo a medias. Esta plenamente dispuesto a disfrutar de la salvación de Cristo, pero no someterse a la santificación; busca los privilegios de Cristo, pero no su persona: separa los oficios de los beneficios de Cristo. Este es un error fundamental. Que todo el que ame la vida tenga cuidado con esto. Es un error destructivo del que has sido advertido en multitud de ocasiones y, sin embargo, no hay otro más común. Jesús es un nombre hermoso, pero los hombres no aman al señor Jesús de forma sincera. No lo aceptan tal con Dios lo ofrece, “Por príncipe y salvador” (hechos 5:31). Separan lo que Dios a unido: El Rey y el Sacerdote. No aceptan la salvación de Cristo tal como El la ha concedido; es ahí donde la separan. Todo hombre desea ser salvado del sufrimiento, pero no desea ser salvo del pecado. Desearían salvar la vida pero mantener sus concupiscencias. Ciertamente son muchos los que introducen esta división aquí; aceptarían la destrucción de algunos de sus pecados, pero son incapaces de abandonar el regazo de Dalila, o divorciarse de su amada Herodía. No pueden ser implacables con su mano o su ojo derechos. Demuestra un cuidado infinito en esto: tu alma esta en juego. El verdadero converso toma a Cristo en su totalidad, y lo toma a todos los efectos y propósitos, sin excepciones, sin limitaciones, sin reservas. Esta dispuesto a tener a Cristo bajo cualquier condición; esta dispuesto a ser objeto del gobierno de Cristo de la misma manera que de su liberación. Dice junto con Pablo: “señor, ¿Qué quieres que yo haga?” (Hechos 9:6). Cualquier cosa señor. Da un cheque en blanco a Cristo para que El establezca sus propias condiciones.    

 

     

  Extracto del libro (Una guía segura al cielo) del puritano, Joseph Alleine